Estás paseando por tu ciudad. A tu alrededor puedes ver edificios con sus ventanales, carreteras con aceras a cada lado, farolas, señales de tráfico… Pero, ¿alguna vez te has parado a pensar de qué están hechas? Lo cierto es que la mayor parte de las cosas que se encuentran diariamente a tu disposición se originan gracias a la minería.
Desde el momento en que te levantas hasta que te vas a dormir, casi todo lo que utilizas contiene rocas y metales que provienen de una mina. La minería impacta en la vida cotidiana de las personas hasta en el más mínimo aspecto del día a día. Rocas y metales están presentes en teléfonos móviles, en el transporte, en pinturas, edificios e incluso en la comida de nuestras mascotas.
Los metales y rocas extraídos de las minas son esenciales para nuestro día a día, pero son materias primas que tendemos a pasar por alto. Son los grandes desconocidos porque el producto final se observa o consume en un estado muy diferente al de la materia prima inicial.
Las rocas y los áridos para la construcción
A excepción de los materiales que proceden del mundo vegetal y animal, y excluyendo a los metales, prácticamente todo lo que está a nuestro alrededor está formado por rocas o ha sido fabricado gracias a ellas. Por ello, resultan indispensables para el desarrollo de la vida urbana.
Los productos mineros son usados en una gran variedad de industrias, pero son especialmente importantes en la construcción. Son tan versátiles que pueden ser usadas para numerosos fines: componentes del hormigón o el cemento, yeso, resinas, construcción de fachadas, ladrillos, tejas, baldosas o azulejos.
Entre las rocas utilizadas para la construcción podemos encontrar:
Los áridos
Engloban un conjunto de materiales entre los que se encuentran arena, piedras y grava. El 75% de los componentes de edificios y obras públicas son áridos. Son utilizados para la confección de hormigones y morteros, balastos de vías férreas, bases de carreteras o para los firmes de aglomerados asfálticos. Los áridos son la materia prima más empleada por detrás del agua, representando más del 50% de recursos consumidos. En 2017, cada español ha consumido alrededor de 2.285 kilogramos de áridos, una media de 6,25 kilogramos diarios. El consumo total de áridos de en la construcción fue de 112 millones de toneladas en 2017.
Conglomerante
Son materiales con propiedades adhesivas que se compactan al ser amasados con agua y se endurecen al secarse.
La cal, resultante de la descomposición de la piedra caliza. Se puede usar para la estabilización de suelos, como componente en mezclas como el cemento o el hormigón o como revestimiento para fachadas.
El yeso, como material de construcción, se obtiene de un mineral del mismo nombre. Además de permitir el revestimiento y refuerzo estructuras, es muy buen aislante térmico, absorbente de la humedad e ignífugo.
Cemento, mortero y hormigón: el cemento está formado a partir de una mezcla de caliza y arcilla calcinadas y molidas. Si se le añade arena, se crea una mezcla denominada mortero. Y si además de arena se incorporan áridos de distinta granulometría, obtenemos hormigón.
Productos cerámicos
Están formados principalmente por arcillas rojas que, al ser hidratados, se comportan plásticamente. Estos productos cerámicos son baldosas, azulejos, ladrillos o tejas, y se utilizan en el revestimiento de muros y paredes. Además, se usan como aditivos al cemento. Son buenos aislantes térmicos, pero su fragilidad es elevada.
Rocas ornamentales
Son aquellas que se utilizan en la construcción sin hacer transformaciones en su composición ni añadirles ningún otro mineral. Admiten ser cortadas para adaptarse al uso que se le quiere dar.
La pizarra, usada fundamentalmente para la construcción de cubiertas debido a su impermeabilidad y facilidad para ser cortada en hojas. El de la pizarra es un sector estratégico para la economía gallega, siendo la comunidad un importante exportador a nivel mundial.
El granito se usa extensamente como revestimiento de fachadas, en pavimentos, bordillos y adoquines, así como en mobiliario urbano y muros. Es un material firme y resistente al desgaste atmosférico, lo que lo hace adecuado para el exterior. En España, el 85% de la producción de granito viene de canteras de Galicia.
Las rocas calcáreas, entre las que se encuentran las calizas, dolomías y margas, se usan como materiales de revestimiento gracias a su versatilidad y durabilidad. Además, son materias primas en la producción de cemento. Las dolomías también se usan en la pavimentación de carreteras e incluso para ciertos tipos de asfaltos. El mármol también entra dentro de esta clasificación ya que se forma a partir de rocas calizas.
Metales básicos para las ciudades
En la vida urbana están presentes numerosos metales que mejoran tanto las infraestructuras disponibles como los objetos que se usan diariamente. Los metales más empleados son el hierro, el acero y el aluminio.
El hierro es el metal más usado a nivel industrial. Se considera imprescindible en la construcción debido a su bajo precio y dureza. Es muy resistente por lo que se emplea en las estructuras de edificios y viviendas. Podemos encontrarlo en vigas, columnas, rejas para puertas, ventanas o incluso mobiliario.
El uso más importante del hierro es como parte de la aleación que compone el acero, que ha revolucionado las posibilidades del sector de la construcción. El acero permite una construcción rápida y a bajo coste. Por su parte, el acero inoxidable, una aleación de acero y cromo, permite soluciones arquitectónicas innovadoras y rentables.
Las propiedades del aluminio lo convierten en un material perfecto para la construcción. Es muy ligero si lo comparamos con otros metales como el hierro o el acero. El aluminio es un metal duradero, resistente a la corrosión y maleable, lo que lo convierte en el material adecuado para el diseño en la arquitectura moderna. Además, es una buena opción para revestir techos y paredes, para marcos de ventanas o para cubiertas de tejado.
Un metal que está ganando popularidad en la construcción es el titanio. Es más ligero que el aluminio y se usa en revestimientos tanto interiores como exteriores. También se utiliza en sistemas de calefacción y refrigeración porque es muy resistente a la corrosión.
Es indiscutible que los minerales juegan un papel clave en la vida cotidiana de las personas. La vida en una ciudad sería muy diferente sin la presencia de los metales y rocas necesarios para fabricar hasta el producto más básico de nuestro día a día. Así, se puede comprobar la importancia que minas y canteras tienen para la sociedad. En el ámbito de la construcción, la mayoría de las estructuras serían impensables sin la existencia de los materiales extraídos por medio de la minería. Al final, es evidente la relación entre la minería y el desarrollo social, el bienestar y la calidad de vida.
Después de ver lo que la minería proporciona a las ciudades, ¿te podrías imaginar tu vida sin ella?