Las aguas mineromedicinales son aquellas que, debido a su composición química y características fisicoquímicas, presentan propiedades terapéuticas que son beneficiosas para la salud. Se originan en el subsuelo, donde permanecen durante largos periodos de tiempo, lo que les permite enriquecer su composición con minerales disueltos. Dependiendo de su origen geológico, pueden emerger a diferentes temperaturas y con distintas concentraciones de elementos como calcio, sodio, azufre, hierro y radón, entre otros. 

Es por esto último por lo que no todas las aguas pueden ser consideradas mineromedicinales. En España, este reconocimiento está regulado por la Ley de Minas y el Reglamento General de la Minería. Para que un agua sea certificada como mineromedicinal, debe someterse a estudios hidrogeológicos y fisicoquímicos que demuestren su estabilidad en la composición y sus propiedades terapéuticas. 

Los organismos encargados de otorgar esta certificación son las administraciones autonómicas competentes en materia de aguas y sanidad. Además, muchos balnearios están inscritos en el Registro de Establecimientos Sanitarios, lo que garantiza el cumplimiento de normativas específicas en el uso de estas aguas con fines medicinales. 

Su uso terapéutico está reconocido desde la antigüedad y, en la actualidad, son objeto de estudio en hidrología médica. Se utilizan en balneoterapia, inhalaciones, irrigaciones y bebidas medicinales, con aplicaciones en el tratamiento de enfermedades reumáticas, respiratorias, digestivas y dermatológicas. Además, estas aguas han sido objeto de diversas investigaciones científicas que buscan mejorar su aplicación en terapias médicas y potenciar sus beneficios mediante técnicas avanzadas de hidroterapia. 

balneario

Tipos de aguas mineromedicinales y beneficios 

  1. Bicarbonatadas: Ricas en bicarbonato, favorecen la digestión, regulan la acidez gástrica y son útiles en afecciones hepáticas. También tienen un efecto beneficioso sobre el metabolismo y pueden contribuir a la regulación del pH corporal. 
  1. Cálcicas: Contienen calcio en alta proporción y son recomendadas para fortalecer los huesos, prevenir la osteoporosis y tratar problemas articulares. Su consumo prolongado puede ser beneficioso en la prevención de fracturas y enfermedades óseas degenerativas. 
  1. Carbónicas o carbogaseosas: Presentan una elevada cantidad de dióxido de carbono, estimulando la circulación sanguínea y favoreciendo la oxigenación de los tejidos. Son utilizadas para mejorar la función cardiovascular y como terapia para problemas circulatorios crónicos. 
  1. Cloruradas: Con alto contenido en cloruros, poseen propiedades antisépticas, estimulantes del metabolismo y beneficiosas para afecciones dermatológicas y respiratorias. Además, su uso en baños y duchas favorece la relajación muscular. 
  1. Ferruginosas: Ricas en hierro, están indicadas para personas con anemia o déficits de este mineral. Favorecen la regeneración sanguínea y el transporte de oxígeno, siendo recomendadas para tratar fatiga y debilidad general. 
  1. Fluoradas: Con una alta concentración de flúor, benefician la salud dental y ósea, ayudando en la prevención de caries y fortaleciendo los huesos. Su uso prolongado contribuye a la remineralización ósea en personas mayores. 
  1. Magnésicas: Con predominio de magnesio, son útiles para trastornos digestivos, musculares y para reducir el estrés y la fatiga. Se recomiendan en casos de insomnio y ansiedad, ya que contribuyen a la relajación del sistema nervioso. 
  1. Oligominerales u oligometálicas: De baja mineralización, tienen efectos diuréticos y depurativos, favoreciendo la eliminación de toxinas y el funcionamiento renal. Su ingesta regular es recomendable para la eliminación de sustancias nocivas en el organismo. 
  1. Radiactivas: Contienen elementos radiactivos en proporciones seguras, como el radón, con efectos sedantes, analgésicos y antiinflamatorios. Son utilizadas en el tratamiento de dolencias reumáticas y musculares crónicas. 
  1. Sódicas: Ricas en sodio, son beneficiosas para enfermedades dermatológicas, reumatológicas y trastornos digestivos. Además, pueden mejorar el equilibrio electrolítico en casos de deshidratación severa. 
  1. Sulfatadas: Con predominio de sulfatos, mejoran trastornos digestivos, metabólicos y hepáticos. También tienen efectos laxantes y detoxificantes, favoreciendo la función hepática y biliar. 
  1. Sulfurosas: Contienen azufre en diferentes formas. Están indicadas para afecciones respiratorias, dermatológicas y reumatológicas. Suelen utilizarse en inhalaciones para mejorar patologías del aparato respiratorio y en baños para tratar enfermedades de la piel. 

Balneario de Mondariz

Balneario de Mondariz. 

Galicia y sus aguas mineromedicinales 

Galicia es una región con una importante tradición termal, albergando numerosos balnearios que aprovechan sus aguas mineromedicinales para tratamientos terapéuticos y de bienestar. La riqueza de sus manantiales convierte a la comunidad en un referente del termalismo en España. 

  • Balneario de Carballo: Ofrece aguas sulfurado-sódicas bicarbonatadas de mineralización débil, que emanan a una temperatura de 42°C. Fueron reconocidas por el Tribunal de Aguas de París como unas de las mejores de Europa a finales del siglo XIX y declaradas de utilidad pública en 1928. 
  • Hotel Balneario de Compostela (Brión): Sus aguas mineromedicinales son del tipo sulfuradas, bicarbonatado-sódicas, silicatadas y fluoradas. 
  • Balneario de Lugo – Termas Romanas: Ofrece aguas sulfurado-sódicas, bicarbonatadas e hipertermales. Emanan a una temperatura de 43,8°C. 
  • Iberik Aguas Santas Balneario & Golf: Ofrece aguas sulfuradas bicarbonatadas sódicas y fluoradas. Emanan del subsuelo a una temperatura de 16 y 24,5°C. 
  • Iberik Gran Balneario de Guitiriz: Aguas de mineralización muy débil, sulfuradas con iones predominantes bicarbonato, cloruro y sodio. Emanan a 17°C. 
  • Arnoia Caldaria Hotel Balneario: Dispone de aguas sulfurado-sódicas, bicarbonatadas y magnésicas. Emanan a una temperatura de 22°C. 
  • Laias Caldaria Hotel Balneario (Cenlle): Ofrece aguas bicarbonatadas-sódicas, alcalinas e hipertermales, a una temperatura de 52°C. 
  • Lobios Caldaria Hotel Balneario: Ofrece aguas hipertermales y aguas de débil mineralización, que emanan a una temperatura de 77,1°C. Los iones predominantes son: bicarbonato, sodio, cloro, flúor y silicatos. 
  • Gran Balneario do Carballiño: Ofrece aguas sulfurado-sódicas, alcalinas, fluoradas, litínicas y radiactivas. Emanan a una temperatura de entre 22 y 28°C. 
  • Balneario de Caldas de Partovia (O Carballiño): Ofrece aguas sulfurosas, sódicas y radiactivas. Emanan a una temperatura de 37°C. 
  • Balneario de Sousas (Verín): Dispone de aguas bicarbonatadas-sódicas, litínicas y fluoradas, que emanan a una temperatura de 19°C. 
  • Balneario Acuña (Caldas de Reis): Las aguas termales del Balneario Acuña son cloruro fluoradas, silicatadas y bicarbonatadas, sulfurosas, sódico-líticas y radiactivas y emanan a 42°C. 
  • Hotel Balneario Dávila (Caldas de Reis): Ofrece aguas clorurado-sódicas, radiactivas, sulfurosas y nitrogenadas. Emanan a una temperatura de 48°C. 
  • Termas de Cuntis: Dispone de aguas sulfuradas, sódicas, fluoradas, silicatadas y litínicas. Emanan a una temperatura de entre 17 y 64°C. 
  • Balneario Baños da Brea (Vila de Cruces): Ofrece aguas sulfuradas, bicarbonatadas, alcalinas y clorurado sódicas. Emanan a una temperatura de 28°C. 
  • Balneario de Caldelas de Tui: Ofrece aguas clorurado-sódicas, sulfídrico-azoadas y radiactivas, a una temperatura de 47°C, 50°C y 56°C en surgencia. 
  • Hotel Eurostars Isla de la Toja: Ofrece aguas clorurado-sódicas, bromuradas, ferruginosas, fluoradas y litínicas; ricas en calcio, potasio y magnesio. Son aguas hipertermales por su temperatura, que oscila entre los 20 y 60°C. 
  • Eurostars Gran Hotel La Toja: Las aguas mineromedicinales termales del balneario del Gran Hotel La Toja poseen una composición química especial que le confiere sus propiedades únicas, caracterizándose por ser clorudadas sódicas y fluoradas, con un alto contenido de elementos mineralizantes especiales como hierro, bromo, estroncio, litio, calcio y magnesio, entre otros; con una temperatura de entre 20 y 60°C. 
  • Balneario de Mondariz: Ofrece aguas carbogaseosas, bicarbonatado-cálcicas y ferruginosas. Emanan a una temperatura de entre 17,5 y 18°C. 

Las aguas mineromedicinales representan un recurso natural de gran valor, más aún en Galicia, tanto por sus beneficios terapéuticos como por su impacto en el turismo termal. Su conservación y uso responsable garantizan su aprovechamiento sostenible y su impacto positivo en la salud y el bienestar.