La plataforma Minería Sostenible de Galicia presentó ayer a los ayuntamientos gallegos una alternativa turística basada en sus instalaciones mineras y características geológicas. El encuentro, que tuvo lugar en la sede Afundación en Santiago de Compostela, tuvo por objetivo acercar a los técnicos de turismo, Grupos de Acción Local ( GAL) y Agentes de Desarrollo Local (ADL) de ayuntamientos con pasado minero las posibilidades del turismo industrial y minero.
Los encargados de inaugurar la jornada fueron Juan de Dios Martínez, presidente de la Cámara Minera de Galicia, y Juan José Durán, perteneciente al Departamento de Recursos Geológicos del Instituto Geológico y Minero de España. Durán comenzó destacando que el turismo en España representa el 12% del PIB, siendo el 3º país más visitado del mundo, y apuntó nuevas medidas para ofrecer una oferta más completa a los visitantes: “El momento para promocionar un turismo industrial y minero es ahora. Un momento en que las tecnologías de extracción han avanzado y las antiguas explotaciones pueden cobrar una segunda vida mostrando parte de nuestra historia”. Además destacó los valores añadidos de esta forma de turismo: “Es actual y atiende peticiones que la sociedad demanda, un turismo de experiencias que tiene en cuenta el entorno natural”.
Por su parte, Martínez quiso destacar la manera en que la minería está enraizada a nuestra tierra: “Desde la Prehistoria, con el uso de la piedra y de los metales, hasta los modernos edificios de cristal y hormigón, pasando por las murallas, las catedrales y los pazos: todos son productos de la minería”.
Presentación del libro ‘Patrimonio mineiro de Galicia’
El presidente de la COMG hizo hincapié en la importancia del libro ‘Patrimonio minero de Galicia’ como germen de la aproximación de la historia minera a la sociedad, una publicación que surge de la colaboración del IGME y la Cámara Oficial Minera de Galicia gracias al convenio que firmaron ambas entidades en 2018, materializado en la Unidad de Recursos Minerales de Galicia. Una unidad que trata de unir fuerzas en proyectos de investigación, difusión y divulgación de sector geológico y minero.
En este marco, Ángel García Cortés, jefe de Área de Patrimonio Geológico y Minero del IGME, fue el encargado de presentar esta publicación. García aprovechó para agradecer la implicación de los demás autores, así como de los ayuntamientos mineros y asociaciones que participaron en su elaboración. Este libro recoge 30 puntos a lo largo del territorio gallego, entre los que se encuentran museos mineros, instalaciones industriales y rutas de senderismo de gran interés geológico y minero.
La riqueza geológica y minera de Galicia
La primera mesa redonda de la jornada, moderada por Pablo Núñez, delegado en Galicia del Ilustre Colegio de Geólogos, giró en torno a los recursos geológicos de Galicia y contó con la presencia de representantes de tres puntos privilegiados de Galicia: Mayte Sobradelo, encargada de las visitas del Museo Minas de Sano Finx; Martín Alemparte, gerente del grupo de desarrollo rural Montañas del Courel; y Juan Ramón Vidal Romaní, impulsor de la Candidatura Xeoparque Costa da Morte.
Romaní resaltó el valor del territorio de A Costa da Morte, con más de 2.000 kilómetros cuadrados y que se encuentra en trámites para presentar su candidatura a la exclusiva red de la UNESCO: “A Costa da Morte presenta grandes peculiaridades, por ejemplo, sus playas son de cantos y no de arena, además esta franja atlántica presenta cuevas graníticas espectaculares que son visitables, pero desconocidas para la mayoría”. También destacó la historia minera de la zona, que merece la pena conocer mediante visitas turísticas: tanto las huellas de antiguas explotaciones de wolframio y estaño como las explotaciones activas en el presente, con la denominada “minería blanda” que explota caolines sin provocar grandes impactos en medio.
Por su parte, Alemparte habló del recién estrenado Geoparque Montañas del Courel y de lo que implica esta nueva denominación. “Un geoparque promueve un desarrollo sostenible, el geoturismo, la conservación y la puesta en valor de los productos de la zona”, comentó Alemparte y añadió que “hay que romper mitos, la minería es compatible con el geoparque dentro de un marco de sostenibilidad”.
Sobradelo habló de la importancia del Museo Minas de San Finx: “Este museo situó Lousame en el mapa”. Desde 1990 la mina estuvo sin actividad hasta que la concesionaria se puso en contacto con el ayuntamiento para evitar que las instalaciones se perdiesen. En la creación del museo colaboraron tanto la concesionaria como la Cámara Minera de Galicia, y no solo es una muestra de la minería de la zona, sino también de su sociedad, muestra de algunos acontecimientos como los primeros movimientos sindicales. Sobradelo adelantó los próximos pasos para el museo, entre los que se encuentra rehabilitar parte de la galería para que sea visitable.
Los tres ponentes coincidieron en la necesidad de que los geólogos dejen de hablar un lenguaje endogámica y se acerquen al pueblo y también señalaron cómo lo hace de la Enseñanza que no haya una materia en secundaria que hable de la historia de la #Terra.
El Geolodía y los geoparques: acercar la sociedad a su entorno
La segunda mesa redonda estuvo moderada por María Vázquez, técnica de la COMG, y en ella participaron Benigno Amor, gerente del Clúster del agua Mineral y Termal de Galicia; y los geólogos Francisco Canosa y Eduardo Clavijo. Amor puso de manifiesto lo que significa el termalismo para nuestra tierra: “Galicia es el destino termal líder en España” y añadió que “se trata de un sector transversal, de origen minero, pero con potencial sanitario y turístico”. Habló además de cómo varias formas de turismo se pueden fusionar, como con el proyecto “Termalismo y Camino de Santiago”, que bebe de la vinculación del peregrino a las fuentes del camino y a la recuperación del cansancio en las termas.
Canosa, geólogo impulsor de la candidatura Xeoparque Cabo Ortegal, habló de los primeros pasos de este proyecto: “Una de las metas es incentivar la economía local con la geología como núcleo”, y recalcó que el grande paisaje tan apreciada por los que visitan Galicia puede tener un valor añadido a través de la geología. “En Galicia contamos con un geosite en Burela y no le damos el valor que merece”. Canosa aprovechó para lanzar un mensaje a las administraciones para que se muestren más comprometidas con la geología local.
Por su parte, Clavijo centró su exposición en el Geolodía, un día que se celebra de forma anual en toda España y que trata de mostrar la geología desconocida de nuestra propia provincia. Clavijo comentó la dificultad que tuvo esta fiesta de la geología en sus comienzos, donde apenas obtuvieron respuesta de los ayuntamientos y como ahora las plazas se cobren 4 meses antes de su celebración. Clavijo también piensa que la geología se debe integrar en el turismo paisajístico: “Si miles de personas ya vienen a propósito a ver los cañones del Sil, el hecho de aprender cómo se formaron es un valor añadido”, declaró.
Poner en valor el patrimonio minero
Mercedes Carreño, directora de la Escuela de Turismo CENP de A Coruña, mostró con su exposición una perspectiva menos técnica y más acercada a la realidad de los turistas. “Somos un país eminentemente turístico, con un turismo maduro y debemos diferenciarnos”, declaró. Para Carreño, el turismo industrial es cada vez más apreciado por turistas maduros procedentes de Alemania, Holanda o Japón; y debe ser parte integrante del turismo cultural. Aprovechó también para hablar de los retos de esta rama del turismo: “Los guías deben ser capaces de trasladar a los visitantes la riqueza que emana ese patrimonio industrial, transmitir emociones mediante el storytelling”. Otro de los problemas que expuso fue la necesidad de hacer accesible este turismo a los visitantes proporcionando información de seguridad, alternativas de transporte y pernoctación, etc.
En la última mesa de la jornada, moderada por Roberto Almuiña, secretario de Arigal, el tema a tratar fue el panorama nacional e internacional del patrimonio minero. Diego Casal, impulsor del Museo de la Minería de Fontao, declaró que “No basta con la voluntad para poner en valor nuestro patrimonio” y destaca que la mina puede ser el hilo conductor que aglutine elementos paisajísticos, naturales o gastronómicos. Casal aprovechó para hablar de su documental “Siguiendo los pasos del oro negro”, una pieza que además de dar una visión productiva, acerca una perspectiva social de la explotación de wolframio durante la II Guerra mundial.
Por su parte, Ángel García resaltó que las leyes de patrimonio cultural presentes en Galicia ya incorporan el patrimonio de carácter industrial, y por lo tanto el minero. Enrique Orche, Sociedad Española para lana Defensa de él Patrimonio Geológico y Minero, aprovechó este bloque para señalar que existen un total de 82 minas ‘ museizables’ en toda España y también señaló que mucha gente hace turismo minero sin lo sabes, como en el Parque de Naturaleza de Cabárceno (Cantabria) o en el Jardín de Cactus (Lanzarote).
Ángel Bernardo Tahoces, director Xeral de Minas e Enerxía da Xunta de Galicia, cerró la jornada con una declaración de intenciones: “La minería solo tendrá futuro si se conoce su pasado, solo desde el conocimiento la sociedad gallega se reconciliará con su minería”. Tahoces señaló además la importancia de la puesta en valor del patrimonio geológico y minero como revulsivo para la España vaciada.