La minería gallega, en cifras

2021-07-26T14:02:28+02:0020/01/2021|

Los productos mineros son imprescindibles para el desarrollo y en última instancia para el bienestar de cada uno de nosotros, ya que están presentes en todos los productos manufacturados que se encuentran en contacto con el ser humano. Estas materias primas han desempeñado un papel clave en nuestra evolución, ya que se han utilizado desde épocas prehistóricas y han marcado el avance de la humanidad hacia lo que es hoy en día. Eso sí, hay que tener en cuenta que en cada época de la historia, las necesidades han ido cambiando, y por lo tanto, la demanda de minerales ha variado.

En la actualidad, las materias primas minerales son la base de las cadenas de valor industriales (cuarzo, wolframio, magnesita, caolín, dunita…), de la construcción (áridos, pizarra, granito o arcilla), de la agricultura y ganadería (turba para fertilizantes, magnesita como complemento alimenticio, arena de cuarzo como cama higiénica de las vacas), de la alimentación (aguas minerales), y del turismo (balnearios) que sostienen la economía gallega.

Galicia cuenta además con reservas de tierras raras y metales, materias primas fundamentales hoy en día para el desarrollo tecnológico, el avance de las energías limpias o el desarrollo de la conducción eléctrica. Sin embargo, en la actualidad se explotan un porcentaje ínfimo de estos yacimientos.

Cada año, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital realiza la Estadística Minera, que recoge de manera minuciosa los datos que tienen que ver con el sector extractivo en España. El último informe publicado data del 2019 y en este posts os desgranamos algunas de las cifras más importantes del sector en Galicia:

El empleo minero en Galicia

Esta industria aporta miles de empleos de calidad en el rural. Si hablamos de cifras directas, más de 10.500 familias gallegas dependen directamente del sector minero.

Cabe destacar que el sector extractivo es el primer engranaje dentro de una cadena de valor que aporta las materias primas necesarias para otras industrias y que genera miles de empleos de manera indirecta.

La producción de minerales

Galicia se sitúa como la cuarta comunidad autónoma en valor de producción, solo por detrás de Andalucía, Cataluña y Castilla y León. En total representa el 7,8% de la producción minera de España con 260 millones de euros, siendo Galicia el líder nacional en la producción de rocas ornamentales, con el 38% de la producción que suman los subsectores de la pizarra y el granito. Si hablamos de producción en toneladas, Galicia obtuvo en 2019 un total de 13.614.665. Dividido entre los áridos con 11.126.017, las rocas industriales con 1.448.384, la pizarra con 440.319, el granito con 373.261, la cerámica con 226.393 y la minería metálica con 291.

La producción en euros está encabezada por la pizarra con 110.348.782, le siguen los áridos con 55.806.971, las rocas industriales con 41.114.953, el granito con 28.086.268, la cerámica con 4.003.481 y en último lugar la minería metálica con 175.

Galicia se posiciona como líder mundial en la producción de pizarra, aquí se extrae un tercio de la piedra natural mundial que se emplea en cubiertas; mientras que Galicia también es líder en la producción de granito en bruto de España y posee el 58% de las explotaciones nacionales.

Sin embargo, de acuerdo a las estadísticas mineras oficiales, tanto la producción como el número de explotaciones mineras activas han decrecido en los últimos años, una tendencia que seguro se verá acentuada cuando se actualicen los datos de la Estadística Minera con el período de la crisis sanitaria.

El número de explotaciones activas en 2019 era de 211, 8 menos que el año anterior. De estas, 93 pertenecen a canteras de áridos, 54 a explotaciones granito, 37 de pizarra, 14 de rocas industriales y 12 de cerámica, mientras que solo hay una explotación dedicada a la minería metálica.

Débil impacto de la Ley de Fomento de Iniciativas Empresariales de 2017

La Ley  5/2017,  de  19  de  octubre,  de  fomento  de  la  implantación  de  iniciativas  empresariales en Galicia, pretendía introducir mejoras en la actividad regulatoria para permitir agilizar los procedimientos para la autorización de los derechos mineros al tiempo que garantiza la máxima seguridad jurídica en todo el procedimiento administrativo.

La norma representa una revisión exhaustiva de la Ley 3/2008 de la Organización Minera de Galicia y, además de acelerar la tramitación, permite la adaptación a la legislación posterior en materia ambiental y minera, garantizando la integración territorial.

Sin embargo, el impacto real en la concesión de nuevos permisos de investigación y de explotación de recursos mineros es muy débil, ya que los empresarios no han encontrado rutas más rápidas para la realización de trámites. Según las estadísticas del Catastro Minero de Galicia de la COMG, el impacto de la Ley ha sido muy débil.